
El “Blue Belt” o “Toyota Wreck» es una inmersión diferente del habitual buceo en Sudán. Este carguero de 104 metros de eslora construido en Alemania en 1950 que se dirigía de Jeddah a Port Sudan cuando, el 2 de diciembre de 1977, chocó contra el arrecife Shab Suadi, a 50 millas de Port Sudan. Toda la tripulación fue rescatada y, a pesar de los esfuerzos de reflotamiento, cuatro días después del choque se deslizó fuera del arrecife y acabó hundiéndose. El sobrenombre de “Toyota wreck” viene de su carga, compuesta por 181 automóviles marca Toyota, camiones, remolques y repuestos. La leyenda dice que estos bienes eran de contrabando.
El Blue Belt se encuentra “boca abajo” en una pendiente de unos 30° y nos permite acceder a él a través de una gran abertura en el casco alrededor de los 28 metros de profundidad aunque no hay nada reseñable en sus bodegas. Dar un paseo alrededor del enorme casco sí que merece la pena y seguro que conseguirás muy buenas fotografías de ambiente.

El gran valor del buceo en este pecio es su carga, que se encuentra dispersa por el fondo, donde podemos encontrar coches, volantes o neumáticos. El buceo en este pecio no es sencillo tanto por su profundidad, entre los 21 y los 90 metros, como por las fuertes corrientes que suelen azotar este canal. Todos los restos que yacen en el arrecife tienen incrustaciones coralinas y entre la fauna que visita este pecio destacan los tiburones de puntas blancas, grandes meros, escuelas de jureles y pargos, peces ángel, diferentes especies de peces ballesta y siempre hay miles de antias revoloteando entre los hierros.